En un lugar de la clandestinidad delirante, yo te miro... a los ojos... comiendo del mismo platillo.
En un lugar secreto de nuestra ofuscación te perdí... y deliro a pesar de tu olvido... que compartimos lo mismo.
El deseo, la entrega. Lo mío lo he perdido, todo es tuyo ¿Cómo recuperar? ¡Amor mío! ¡Dime! Tu cariño.
En un resquicio de demencia la cordura se ha ido, ya no sé si estás o estoy muriendo contigo... solo, sin ti.
En mi lugar de insensatez he perdido más de lo que contigo gané. Este amor es una rareza...
Que en manos de la locura he dejado... y sin embargo sigo tan perdido cuando me encontraba contigo.
¡Basta! ¡Ponle fin! ¿O qué pretendes que sea yo, cuando sin voluntad sigo?
Me retiro, recuperando lo perdido de cenizas por el fuego compartido.
No hay comentarios:
Publicar un comentario